BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández le transmitió hoy al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-Moon, el renovado reclamo para que el Gobierno de Inglaterra se siente a la mesa de negociaciones por la soberanía de las australes islas Malvinas.
"Inglaterra ha desoído sistemáticamente la resolución 2065 de Naciones Unidas, primero porque sí y luego bajo el pretexto de que había ocurrido en una dictadura militar en el año 82", cuando ambas naciones se enfrentaron en una guerra por el archipiélago del Atlántico Sur, expresó la mandataria al concluir el encuentro en la Casa Rosada.
"Por eso reclamamos a las Naciones Unidas un rol más activo aún, no para lograr que le den la razón a nadie, sino que se cumpla esa resolución que sólo reclama que dos países, dos partes, se sienten a negociar una controversia", subrayó Fernández, durante su discurso. Luego, instó a "los países que tienen un lugar importante en el Consejo de Seguridad o en el G-8" a respaldar las resoluciones de la ONU y no dar un ejemplo de doble estándar".
Demoras y disculpas
Ki-moon arribó esta mañana a Buenos Aires proveniente de Colombia, luego de recorrer unos 700 kilómetros por tierra debido a que su avión debió aterrizar en Córdoba, a causa de que los aeropuertos de Buenos Aires no estaban operables por las cenizas del volcán. "Las cenizas son chilenas, no tenemos nada con nuestros amigos chilenos, pero son de ellos", bromeó la mandataria al disculparse ante el funcionario, por los inconvenientes que tuvo durante su viaje.
Tras la conferencia de prensa conjunta, Fernández agasajó a Ki-moon con un almuerzo en el Museo del Bicentenario de la Casa de Gobierno. A su turno, el titular de la ONU destacó el "papel decisivo y creciente en el ámbito mundial" que tiene la Argentina. "Es uno de los socios más fuertes de las Naciones Unidas y uno de los estados miembros más importantes", declaró.
También elogió la gestión de la Presidenta y aseguró que el país "bajo su gran liderazgo tendrá mayor prosperidad". La jefa de Estado respondió con un apoyo explícito a la continuidad del dirigente surcoreano al frente del organismo: "vemos con beneplácito su reelección al frente de Naciones Unidas".
La agenda oficial del funcionario prevé una visita al Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos, que funciona en el predio de la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), uno de los principales centros clandestinos de detención durante la última dictadura militar (1976-1983).
Ki-moon disertará en la Cancillería argentina y mañana recorrerá el Centro Argentino de Entrenamiento Conjunto para Operaciones de Paz (Caecopaz), en la localidad bonaerense de Campo de Mayo. Tras un almuerzo en su honor en el Ministerio de Relaciones Exteriores, partirá por la tarde rumbo a Uruguay. (DPA)